Aprendiz de escritor...arquitecto de mi existencia.

rio laja chile

GUSTAVO ARANEDA

jueves, noviembre 08, 2007

CEFERINA Y DAGOBERTO (2a Parte)

¿Como dijiste que te llamai?
Ayentemo Rebolledo Soto
Ayen… ¿cuánto?
A yen te mo, respondió suavemente el joven…
¡Oiga mi sargento!, este se llama Ayentemo; dirigiéndose al uniformado que estaba parado cerca de la ventana como momificado y que se veía en silueta por el sol que entraba por el ventanal…
¿Y de donde salió ese nombre pelao?, preguntó el sargento con una voz potente y autoritaria.
Es mapuche...
¿Y vos soi mapuche?
No, no que yo sepa…
¿Y que sabis entonces?
Que quiero hacer el Servicio Militar
¿Sabis andar a caballo?
Si, dijo el mocetón mientras apretaba con fuerza medida su chupalla que tenía sujeta y puesta por detrás…
Aquí se dice; Si mi sargento, ¿escuchaste pelao?, interrumpió el soldado que estaba haciendo las anotaciones.
No se preocupe soldado Palma, ya va a aprender…déjelo adentro...
Faltan unos papeles mi sargento...
Dejélo no mas, me tinca es pelao, que pase el siguiente...
Si mi sargento…
Fue así como Ayentemo se incorporó al Regimiento de Caballería de Angol
.......
.......
¿Y tu no vas a salir de franco?
No mi sargento
¿Tenis donde ir?
No mi sargento
¿Y no tenis mamá?
No mi sargento, murió cuando yo era niño, no la conocí
¿Y tu taita?
Tamien t’a muerto, mi sargento
¿Entonces soi huacho?
Asi parece mi sargento
Y no tenis a nadie?
Al viejo Juancho no mas, mi sargento
Anda a verlo, entonces… llevais como tres meses adentro y eso no es bueno, y no vayai con las manos vacías..
Es que yo vivo aquí ahora…mi sargento
Pero cuando terminis el servicio te vai a tener que irte…
Y si Ud me ayuda, me podría quedar contratao…mi sargento
Ayentemo lo tenía decidido, quería ser militar, quizás porque de alguna manera lo llevaba en la sangre, y el deseo de ser parte de algo además del cariño que tenía por los caballos, era un concripto que desde el primer día mostró cualidades innatas de rastreador, contaban que podía seguirle el rastro a una lagartija en un campo de trigo.
......
......
Juancho se quedó un tiempo en el rancho de Dagoberto, se levantaba muy de madrugada y se instalaba en un peñasco de donde se dominaba todo el valle y sólo bajaba de tanto en tanto y ya entrada la noche se iba a dormir, eso lo hizo por casi dos meses, entre tanto Ceferina se fue apagando lentamente, por la ausencia prolongada de Dagoberto y una vez que sintió que ya no regresaría entró en un estado de pena, a cada día, se lo pasaba mas encerrada mientras que Ayentemo daba sus primeros pasos.
El pequeño huerto, a pesar de los pocos cuidados que tenía, dio sus frutos, Juancho hizo las cosechas y una tarde ella ya no salió a conversar el mate como lo hacia cada día…esa noche por primera vez Juancho entró a la casa...
¿Que le pasa comadre?
No tengo ganas de naa
Pero…
¿Compadre Juancho, ud se podría hacer cargo del niño?
¿Y por que me dice eso?
Yo me voy a ir con el Dago…
Conversaron un par de horas a la luz del chonchón, hasta que el chonchón de Ceferina se apagó para siempre…
.......
.......
¿Y que pasó después Juancho?
Gueno, ¡no me iba a quedar ahí contigo! y chiquito… nos juimos p’a Los Sauces, sabía quienes eran tu abuelos, tus tíos…
No quiero saber de ellos…
Si no te voy a contar naa que tu no queris saber… Yo me puse a trabajar en lo que cayera y…
¿Por qué no te casaste nunca? ¿No teniai mujer, ni hijos?
Yo nunca fui casao, no tengo más hijo que vos y, como nunca dije naa de ti… me jue difícil conseguir mujer… asi que por eso somos los dos no mas…Gueno gueno… ahora cuente de Ud será mejor… las historias que se recuerdan son siempre tristes y ahora hay que estar contento… ¿Cómo te ha ido en el Regimiento?
Bien… tengo a cargo los caballos de los oficiales, y parece que me van a contratar, por lo menos eso fue lo que me dijo mi capitán la semana pasaa y también mi sargento, pero tengo que aprender bien a leer y escribir, ¡eso si que me cuesta!…
Ambos quedaron en silencio, mientras un pitillo se consumía entre los dedos de Ayentemo…
¿Algún dia me contara la historia de mis padres?
Cuando Ud quiera…
Ahora…
El viejo se rascó la cabeza, la decisión del joven lo tomaba por sorpresa y comenzó a hacer dibujos incoherentes en el suelo con una varilla de retamo que usaba para espantar los perros…
Mire hueñe, le voy a contar toa la historia, pero ud no me va a interrumpir porque sino nunca va a saber el final…
Como ud. mande…
Y fue así como Juancho le contó toda la historia, incluyendo el por que de su nombre… Y a ud le pusieron Ayentemo, porque según la comadre ud era muy "hermoso y gracioso"…
Y mi taita, ¿Dónde esta enterrado?
No lo sé… porque después que lo mataron se fueron p’al lado de Traiguén y parece que se lo llevaron con ellos porque no encontré por ninguna parte tierra removía…
¿Y mi amá?
La enterré a los pie de un sauce que estaba al final del huerto, ¿y qué más iba a hacer?... hice el hoyo en la noche, de madrugada la amortaje y ahí quedó…con una cruz de laurel…
El silencio volvió a reinar entre los dos hombres…
....
....
Don Celedonio, le presento al joven Ayentemo Rebolledo
Mucho gusto joven
Muchas gracias por recibirme señor Juez
Y dígame don Vicente ¿para que me trajo a este joven?, mientras se sentaba en frente a su escritorio.
Don Celedonio, este joven quiere escribir la historia de los cuatreros de esta región y lo hace en sus ratos libres, él es del Regimiento de Angol, viene recomendado por mi Capitán Rodríguez…
Ah… hay hartas historias por estos lados, pero mejor sería que hablara de don Pedro Trizano y su gente, mire que si no fuera por ellos…pero ¿Qué es lo que quiere saber Ud jovencito?
Bueno, mi capitán me comentó que el Regimiento, muchas veces ayudó a corretear a los cuatreros y en el cuartel se cuentan muchas historias de don Pedro y su gente, pero también se cuenta que hubo un malulo que les dio muchos dolores de cabeza hasta que lo mataron…y que Ud...
Ah… ¿ud se refiere al Bandido?…
No se si será el mismo….
Ese tiene que ser… Don Vicente porque no le dice a la Melania que nos traiga una mistelita y así aprovecho de contarle la historia del Bandido a este joven… y mientras don Vicente salía al corredor, el juez buscó en un estante unos legajos algo polvorientos…
Aquí esta el expediente… ¿sabe ud que el Bandido no tenía nombre?
¿Y por qué?
Por que no tenía amigos, ni parientes conocidos, nunca dijo su nombre, y por aquí lo venía venir, muy de tarde en tarde, y si no fuese que unos vecinos le reconocieron, por el poncho, o si no, nunca lo habríamos pillado… espere…. Aquí esta el informe final…”los testigos reconocieron al cadáver como el del Bandido y que la última vez que lo vieron estaba bebiendo en el negocio de don Bartolomé Lillo, y con esa comprobación de identidad y firmada las correspondientes declaraciones este Tribunal ordena se le de cristiana sepultura en el cementerio de la localidad, con cargo a fondos municipales y se le inscriba en el Registro Parroquial con el nombre de “Bandido”. En Traiguén a, bla bla bla.
Al joven se le hizo un nudo en la garganta y trató de mantener la compostura, mientras entraba la empleada con los vasos de mistela, nunca un trago había sido tan amargo y largo…
......
......
¿Alguna novedad?
Si, renuncio jefe, ya estoy viejo para estar pasando susto…
Pero ¿por qué?, nunca los muertos han dado problemas, y soltó una risotada el administrador del cementerio mientras le tomaba por el hombro al rondín…
Mire jefe, anoche no pude echar ni una pestañada… los perros casi se vuelven loco… y ladraban como endiablados para allá…y no se atrevían a cargar… de repente se encendió una vela, ¡no se de donde!… y ahora en la mañana, con la claridad, fui a ver... y en la tumba del Bandido había un ramo de flores frescas… y en la cruz, dos letras pintadas de blanco…
¿Y que letras?
Una De y una Erre… ¿eso no será Diablo Resucitado, jefe?
Alguien que te hizo alguna broma… ¿tuviste tomando anoche?…
Naa patrón… revisé bien, no había ni una huella, nada de nada….
......
......
En la próxima salida te voy a ir a dejar flores, mamá…

1 Comentarios:

Sencillamente notable, Gustavo.
Debes eliminar la palabra APRENDIZ... de escritor.

Un abrazo.

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